La belleza de este árbol ha motivado, que muchas personas lo utilicen como planta ornamental, en todas las etapas de su desarrollo. En el momento de la floración y luego en el desarrollo de los frutos en ramilletes, aumenta la belleza y el atractivo de esta planta, que produce regularmente 2 y 3 quintales de frutos por árbol y en muchos casos puede llegar a 8 quintales. En Malasia país de origen de este frutal, se obtienen dos cosechas al año, una de diciembre a enero y la otra de junio a septiembre.


La zona donde se está produciendo este frutal en el país, es en Cevico, provincia Sánchez Ramírez, también hay una plantación comercial en “Los Jobos”, Cotui del Sr. Manuel Brito, quien mercadea la producción en varios supermercados de la ciudad de Santo Domingo. Requiere de alta pluviometría (abundantes lluvias), suelos orgánicos, de buena profundidad y de buen drenaje. 

En este frutal se observan plantas con flores pistiladas y flores estaminadas, es decir flores hembras y machos. También hay plantas de solo flores machos, estas no producen frutos, sin embargo es importante tener un porcentaje mínimo, para la fecundación de las plantas de flores hembras. En ocasiones se obtienen en las plantas sembradas por semillas, un 60% de plantas machos. 

Es un problema porque el productor se da cuenta cuando los árboles tienen de 3 a 5 años y tiene que eliminarlos y sembrar plantas hembras. Un método que se utiliza con frecuencia en la propagación es el acodo aéreo. De esta manera se tiene la seguridad de que las plantas que se están sembrando son hembras o plantas machos. Es importante que en la plantación el 12%  de las plantas sean de flores macho y que a su vez estén bien distribuidas, para que logren polinizar y fecundar todas las flores.

En la actualidad se debe investigar la propagación del rambután a través de la micro-propagación. Se podrían utilizar el cultivo de meristemos, ápice caulinares, ápices radiculares, óvulos inmaduros, anteras inmaduras, callos, células, etc..

 Se logra con este método obtener miles y millones de plantas de igual genotipo y también atendiendo al requerimiento de plantas hembras y plantas machos, la cantidad exacta que deseamos. El árbol de rambután es de un tamaño mediano de 15 a 25 metros de altura. Se desarrolla y produce bien de 0 metros de altura sobre el nivel del mar a 600 metros sobre el nivel del mar, esa también es la altura sobre el nivel del mar, que exige el cultivo del cacao. Se recomienda en las plantaciones de cacao, utilizar como árbol de sombra al rambután. De esa forma protegeremos mejor el terreno de la erosión, el agua de lluvia se almacenara en las profundidades del terreno y tendremos producción de cacao y de rambután.

México, Costa Rica, Honduras y toda Centroamérica esta cultivando este frutal desde el 1950- 1960 y últimamente han aumentado la extensión dedicada a este cultivo. En el país la Fundación Progressio, en la finca “Las Marías”, en Cevicos, Cotui, tiene una pequeña plantación en muy buenas condiciones. Visitamos hace unos días esta plantación y quedamos asombrados de la gran productividad de esta especie frutal


En la Escuela Agrícola Salesiana (IATESA), estamos junto al padre director Demetrio Salvador Romero, coordinando los trabajos para la siembra de este cultivo proporcionándole el riego por goteo y toda la tecnología necesaria para que se desarrolle normalmente. Esto también se ha realizado en la Universidad ISA, en La Herradura, Santiago, con el cultivo del mangostán, otro cultivo tropical exótico. Con la colaboración del Dr. Amable Vásquez decano de la facultad de Ciencias Alimentarias y del Ambiente y de los profesores Ing. Edward Roa y el Ing. José Fortuna, está sembrada un área de 600 m2 a la cual se ha dotado de riego por goteo y se ha tenido en cuenta las exigencias de P H, fertilidad, drenaje y demás condiciones del suelo. 

En el campus de la Escuela Agrícola Salesiana de La Vega, siempre contando con la colaboración de la Fundación Progressio, se está planificando la siembra de pimienta, nuez moscada, clavo dulce, mangostán y otras especies. Todas esas especies tropicales se desarrollan y producen muy bien en zonas lluviosas del país, en la zona de La Vega y Santiago se utilizara el riego por goteo en compensación a la falta de una mayor pluviometría.